El abece de mitos y leyendas universales

7 La vida después de la muerte y la momificación Los antiguos egipcios creían que cada persona poseía un cuerpo y un espíritu o fuerza vital, que continuaba después de la muerte. Por eso, cuando una persona moría, su cuerpo se conservaba mediante la momificación. Solo los egipcios más ricos podían encargar sus momias, ya que este era un proceso muy costoso. Primero, se purificaba el cuerpo del difunto con agua. Los embalsamadores colocaban al difunto sobre una mesa con forma de león. Le extraían el cerebro y las vísceras, y lo desecaban con sal para evitar su descomposición. Posteriormente vendaban el cuerpo con lino y resina. Durante todo el proceso, un sacerdote vestido como Anubis conducía los ritos funerarios. Finalmente se le colocaba a la momia una máscara y se la introducía en un sarcófago. Este se colocaba en una cámara, junto con ofrendas, alimentos y objetos que acompañarían al muerto al Más Allá. Anubis: ayudó a su madre Neftis y a Isis a resucitar a Osiris. Es el dios de la medicina, encargado de velar los ataúdes y de guiar a las almas en el otro mundo, acompañándolas hasta la presencia de Osiris. Neftis Representa el hogar, la oscuridad, la noche y la muerte. Hermana de Isis y esposa de Seth, como no pudo tener hijos con él mantuvo relaciones con Osiris y concibió a Anubis. Ayudó a Isis a volver a la vida a Osiris; por eso se la relaciona con los ritos funerarios. En la imagen, Isis y Neftis, representadas en el Papiro del escriba Ani .

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