SANTILLANA USA - La ciudad de los dioses

II 12 de marzo de 1519 Es una tarde tranquila. Después de veinte días de viaje, escucha- mos por fin ese grito que tanto hemos esperado: ¡tierra! Desde el barco vemos algo oscuro, cada vez más grande, entre el mar azul y el naranja del cielo. Allí, detrás de los árboles y de las montañas, a la entrada de un gran río, se levantan una ciudad y su puerto. Está cayendo la noche y casi no hay luz. Debemos esperar en los barcos hasta mañana para entrar en la ciudad. Así lo ha decidido mi señor. Todos pensamos en el día que nos espera. Tampoco duermen los indios en la ciudad, estoy seguro... 13 de marzo de 1519 Por fin sale el sol y podemos ir a tierra, a una playa blanca como la nieve. Cuando bajamos de las barcas 11 , me doy cuenta de que mi señor está muy emocionado 12 . Todos los hombres esperan en silen- cio. Entonces Cortés levanta su espada 13 hacia el cielo, y dice: «Des- de hoy, estas tierras son del Rey de España». Pero el peligro está cerca. De nuestros barcos llegan más hombres con caballos, armas y comida. Lejos, entre los árboles, podemos ver la ciudad y mucha gente que corre de un lado a otro. Son cientos 11