Había una vez una niñita
que se llamaba Caperucita Roja.
La llamaban Caperucita Roja
por la caperuza roja que llevaba.
Caperucita Roja vivía con su mamá
en el bosque.
Un día, su mamá le dijo:
—Tu abuelita está enferma. Llévale
esta cesta con frutas. Pero no hables
con extraños por el camino.
2