El folículo piloso se inserta
en la capa de la piel
llamada
dermis.
En la base del folículo las células
se agrupan y se multiplican
constantemente empujando a las más
HU[PN\HZ OHJPH SH Z\WLYÄJPL KL SH WPLS
En la epidermis, las células,
ya muertas, se impregnan
de queratina y van formando
el tallo, que emerge fuera
de la piel.
La queratina es una proteína
K\YH ` ÄIYVZH X\L MVYTH
la cutícula del pelo (su capa
Z\WLYÄJPHS WYV[LJ[VYH
La corteza del pelo contiene melanina,
que le da color. Cuando la producción
de melanina se interrumpe, el pelo
queda blanco (canas).
Un músculo diminuto
es capaz de ponernos
los pelos de punta cuando
hace mucho frío, lo que
se conoce como
piel de gallina,
o cuando tenemos mucho miedo.
La glándula sebácea,
productora de sebo, lubrica
el pelo y la piel que lo rodea.
Un capilar arterial
le aporta sangre con
oxígeno y nutrientes.
Un capilar venoso retira sangre
con sustancias de desecho.
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Los primeros pelitos
El pelo aparece mucho antes
del nacimiento, durante
la etapa fetal. Crece hasta
en las palmas de las manos
y en las plantas de los pies.
Y se va transformando en
un vello suave y abundante
llamado
lanugo
que, además,
está siempre lubricado por
una sustancia grasa. El lanugo
protege la piel del futuro bebé
que, dentro del útero, está
sumergido en el líquido
amniótico. Algunos bebés
siguen siendo muy peluditos
al nacer.
MPLE
