TEACHER’S GUIDE OVERVIEW LEVEL 10, UNIT 3
27
Lectura
©
Santillana
71
Sobre el autor
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ÊÃÕÃÌ>ÌÛ®°Ê
Gorras, co-
múnmente, de cuatro picos.
UÊÊLiÀ}>ÌiÃ
ÊÃÕÃÌ>ÌÛ®°Ê
Barcos
de vela.
iÀ>Ê >âÊ `iÊ >ÃÌ
nació en
1496, en España, en el seno de una
familia de clase baja. Una vez llegó
a las Indias se convirtió en soldado y
en cronista español. Participó de las
expediciones de la conquista llevadas
a cabo en México, Guatemala y Hon-
duras. También fue encomendero
de indios y regidor. Su obra
Historia
verdadera de la Conquista de la Nueva
España
fue escrita a una edad tardía
y, a pesar de su poca instrucción y
avanzada edad, manejó exitosamen-
te una prosa llana y espontánea. En
este texto el autor relata la epopeya
de la Conquista y los lugares en don-
de acontece. Su importancia radica
en el valor que le otorga al papel lle-
vado a cabo por el soldado común
durante el proceso de la Conquista,
a quien iguala con el caudillo. Murió
en Guatemala en 1584.
Montezuma: “De noble condición me parece Bernal Díaz”; porque a todos
nos sabía los nombres como dicho tengo. Y me mandó dar tres tejuelos de
oro y dos cargas de mantas.
Dejemos hablar de esto y digamos cómo por la mañana, después que
hacían sus oraciones y sacrificios a los ídolos, o almorzaba poca cosa, y no
era carne, sino ají estaba empachado una hora en oír pleitos de muchas par-
tes de caciques que a él venían de lejanas tierras. Ya he dicho otra vez, en el
capítulo [XCV] que de ello habla, de la manera que entraban a negociar y el
acato que le tenían, y cómo siempre estaban en su compañía en aquel tiem-
po para despachar negocios veinte hombres ancianos, que eran sus jueces, y
porque está ya memorado no lo tornaré a recitar. Y entonces alcanzamos a
saber que las muchas mujeres que tenía por amigas casaba de ellas con sus
capitanes o personas principales muy privados, y aun de ellas dio a nuestros
soldados, y la que me dio a mí era una señora de ellas, y bien se pareció en
ella, que se dijo doña Francisca; y así se pasaba la vida, unas veces riendo,
y otras pensando en su prisión.
Quiero aquí decir, puesto que no vaya a propósito de nuestra relación,
porque me lo han preguntado algunas personas curiosas, que porque sola-
mente el soldado por mí nombrado llamó perro a Montezuma, aun no en su
presencia, le mandó Cortés azotar, siendo tan pocos soldados como éramos
y que los indios tuviesen noticia de ello. A esto digo que en aquel tiempo
todos nosotros, y aun el mismo Cortés, cuando pasábamos delante del gran
Montezuma le hacíamos reverencia con los
bonetes
de armas, que siempre
traíamos quitados, y él era tan bueno y tan bien mirado, que a todos nos
hacía mucha honra; que además de ser rey de esta Nueva España, su per-
sona y condición lo merecía, y demás de todo esto, si bien se considera la
cosa en que estaban nuestras vidas sino solamente mandar a sus vasallos le
sacasen de la prisión y darnos luego guerra que en ver su presencia y real
franqueza, y cómo veíamos que tenía a la contina consigo muchos señores
que le acompañaban y venían de lejanas tierras otros muchos más señores,
y del gran palacio que le hacían, y al gran número de gente que a la contina
daba de comer y beber, ni más ni menos que cuando estaba sin prisión; y
todo esto considerado, Cortés hubo mucho enojo luego que lo supo que tal
palabra le dijese, y como estaba airado de ello, de repente le mandó castigar
como dicho tengo, y fue bien empleado en él. Pasemos adelante y digamos
que en aquel instante llegaron de la Villa Rica indios cargados con las dos
cadenas de hierro gruesas que Cortés había mandado hacer a los herreros;
también trajeron todas las cosas pertenecientes para los
bergantines
, como
dicho tengo, y así como fue traído, se lo hizo saber al gran Montezuma. Y
dejarlo he aquí, y diré lo que sobre ello pasó.
Bernal Díaz del Castillo
(español)
(fragmento)
Apuntes
© Santillana
101
Lectura
©
Santillana
71
S bre el autor
UÊÊL iÌiÃ
ÊÃÕÃÌ>ÌÛ®°Ê
Gorras, co-
múnmente, de cuatro picos.
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Barcos
de vela.
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nació en
1496, en E paña, n el seno de una
famili de cl se baja. Una vez llegó
a las Ind as se c nvirtió en soldado y
en cr nist es añol. P rticipó de las
expediciones de a conquista llevadas
a cabo en México, Guatemala y Hon-
duras. También fue encomendero
de indios y regidor. Su obra
Historia
verdadera de la Conquista de la Nueva
Españ
f e escrita un edad tardía
y, a esar de s poca instrucción y
vanz da edad, man jó exitosamen-
te una prosa lla a y espontánea. En
este texto el utor r lata la epopeya
de la Conquista y los lugares en don-
de acontece. Su importancia radica
en l valor que le otorga al papel lle-
vado a cabo p r el soldado común
durante l proceso de la Conquista,
quien iguala c n el caudillo. Murió
en Guatemala en 1584.
Montezuma: “De noble condición me parece Bernal Dí z”; porque a todos
nos sa ía los n mbres com dicho tengo. Y me mandó dar tr s tejuelos de
oro y dos cargas de mantas.
Dejemos hablar de esto y digamos cómo por la mañana, después que
h ía us oracione y sacrifici a los ídolos, o almorz ba poca cosa, y no
era carne, sino ají est ba empach do una hora en oír pleitos de muchas par-
t de c ciqu s que a él venían de lejanas tierras. Ya he dicho otra vez, en el
capít lo [XCV] que de lo h bla, de la maner que ntraban a negociar y el
acato que le tenían, y cómo siempre estaban en su compañía en aquel tiem-
po para despachar egocios v inte hombres anci os, q ran sus jueces, y
porque está ya mem rado no lo tornaré a recitar. Y e tonce lcanzamos a
aber que las muchas mujeres que tenía por amigas casaba de ellas con sus
capitanes o personas principales muy privados, y aun de ellas dio a nuestros
soldados, y la que me dio a mí era una señora de ellas, y bien se pareció en
ella, que se dijo doña Francisc ; y sí se p sab la vida, u as veces riendo,
y otras pensando en su prisión.
Quie o aquí decir, puesto que no vaya a propósito de nuestra relación,
porque me lo han preguntado algunas personas curiosas, que porque sola-
mente el soldado por mí nombrad llamó p rro Mo tezuma, aun no en su
presencia, le m ndó Cortés azotar, siendo tan pocos s ldados como é mos
y que los indios tuvies n n ticia de ello. A sto digo qu en aquel tiempo
todos nosotros, y aun el mismo C rté , cuando pasábamos delante del gran
Montezu a l hacíamos reverencia con los
bonetes
de ar as, que siempre
tr íamos quit dos, y él era tan bu o y t n bien mira , que a todos nos
hacía mucha honra; que además d er rey de e t Nueva España, su per-
sona y condi ión lo merecía, y emás de todo esto, si bi n se considera la
cosa e q estaban nuestra vidas sino solamente mandar a sus vasallos le
saca en de l pri ión y darnos luego guer a que n ver su presencia y real
franqueza, y cómo v íamos que tení a la contina c nsigo muchos señores
que le acompañaban y venían de lejana tierras otros muchos más señores,
y del gran pal io que le hacía , y al gran número de gente que a la contina
daba d comer y beber, ni más ni me os que cuando e taba sin prisión; y
todo est considerado, Cortés hub m ch enojo lueg lo supo que tal
palabra le dij e, y como estaba airado d ello, de repente le mandó castigar
com dicho tengo, y fue bien empleado en él. P semos adelante y digamos
que e aqu l instant llegaron de la V lla Rica indios carga con las dos
cadenas d hierro gruesas que Cortés había mandado hac a los herreros;
también trajeron todas las cosas pertenecient s p ra los
bergantines
, como
dicho teng , y así como fue traído, s lo hizo saber al gran Montezuma. Y
dejarlo he aquí, y diré lo que obre ello pasó.
Bernal Díaz del Castillo
(español)
(fragmento)
Cierre
Anime a los estudiantes a leer el apar-
1.
tado
Sobre el autor
, de la página 71 del
libro de texto. Pídales que comparen
y contrasten las figuras de Bernal Díaz
del Castillo y Fernando González de
Oviedo. Motívelos a buscar informa-
ción adicional, si fuera necesario.
Presente a los estudiantes una ilustra-
2.
ción del mural
Tenochtitlán
, del artista
mexicano Diego Rivera. Luego, com-
parta con ellos la ópera
Montezuma
,
de AntonioVivaldi.
Pregunte:
¿Qué les parece el mural que acaban
•
de observar?
¿Qué opinan de la ópera que acaban
•
de escuchar?
¿Qué piensan acerca de que la histo-
•
ria sea materia artística?
¿Cómo contribuyen estas obras a la
•
preservación de la memoria histórica
de los pueblos?
Anime a sus estudiantes a buscar in-
3.
formación en Internet acerca de obras
de arte (esculturas, pinturas, etc.) cuya
inspiración sea un evento histórico.
Motívelos a presentar la obra a sus
compañeros de clase y a explicar cuál
evento histórico la inspiró.
¿Qué le sucedió al soldado que llamó "perro" a Montezuma? ¿Por qué?
•
Anime a los estudiantes a componer un retrato del emperador Montezuma, de
3.
acuerdo con el testimonio de Bernal Díaz del Castillo. Pídales que compartan su
escrito con sus compañeros.
Sugiera a sus estudiantes que redacten un párrafo en el que utilicen todas las
4.
palabras de vocabulario que aparecen en el margen de las páginas 70 y 71 del
libro de texto. Anímelos a consultar el diccionario si fuera necesario. Motívelos a
compartir sus párrafos con sus compañeros.
Anime a los estudiantes a leer y contestar las preguntas de los apartados
5.
Al leer
y
Al concluir
, de la página 70 del libro de texto. Discuta con ellos las respuestas
de las preguntas.